Antes y después – Copywriting

Todos los días nos enfrentamos a textos que publicitan servicios, que informan sobre productos o que intentan generar en nosotros una nueva necesidad. Muchos de ellos pasan sin pena ni gloria por nuestra vida: No nos enganchan, no nos convencen, no nos aportan nada. Como usuarios, ni reparamos en ello. Pero como creadores de contenido, artistas, redactores o empresarios tenemos que preguntarnos qué estamos haciendo mal para que los textos que acompañan nuestro producto pasen tan desapercibidos.

Y aquí viene la mala noticia: Si quieres que los textos de tu blog o de tu página web funcionen, no puedes redactarlos si no tienes experiencia en comunicación y copywriting. No puedes encargárselos a un conocido al que le gusta escribir o que sabes que fue el mejor en clase de gramática: Tienes que encargárselos a un copywriter.

Muchas veces me encuentro textos que sé que podrían mejorarse por una razón o por otra, y aprovecho para hacer un ejercicio de redacción. Y eso es justo lo que vengo a enseñarte, el antes y el después de una página web si confías en un profesional. Mi objetivo: que mis textos estén a la altura de tu profesionalidad y de la calidad de tu producto.

No hace falta explicar qué párrafo es el original y cual está editado, ¿verdad?

En el copywriting es fundamental conocer el producto y los objetivos de la empresa. Cuando realizo estos ejercicios de redacción tengo poca información al respecto, pero trato de hacerlo lo mejor posible con lo que pueda extraer del párrafo original.